Alegre y radiante: una composición femenina, floral y solar. A drop d'Issey Eau de Parfum nos invita a mirar el mundo desde una nueva perspectiva para descubrir la belleza oculta de la naturaleza. Una composición salvajemente femenina que ilumina nuestro estado de ánimo: un envolvente rastro solar de lila con una nota almizclada y un toque de leche de almendras. Seguimos el viaje de una gota por la naturaleza. En una gota transparente, la gota pierde su forma y adopta una nueva. Se encoge y estira. Se refleja, rebota y cambia su perspectiva. La pureza de su frasco redondo combina con la sencillez de una forma perfecta y poética con una superficie deliberadamente táctil del frasco en una sola pieza. Como un espejo y una lupa, deja paso a los sueños, la poesía y la fantasía.
Una fragancia que nos invita a descubrir la poesía y la belleza insospechada de la naturaleza.
A drop d'Issey Eau de Parfum es una fragancia solar envolvente para mujer.
Revela el perfume de una flor inalcanzable, la lila, cuyo aroma no puede extraerse de la flor en la naturaleza y fue recompuesto por primera vez por la perfumista Ane Ayo. ¿Cómo? Utilizando la química verde para sacar el máximo partido a las técnicas más innovadoras y protegiendo al mismo tiempo las lilas reales, ya que no es necesario cosechar las flores. Es la naturaleza, recreada por la mano del hombre.
En las notas de salida, la rosa de Damasco aporta una faceta floral pura. En el corazón de la fragancia, la lila se ve realzada por una nota de flor de azahar de origen ético y un acorde de leche de almendra. En las notas de fondo, un acorde almizclado se une a la madera de cedro reciclada y a la vainillina para completar la estela olfativa.
Acorde de lila: el acorde solar y envolvente de la lila es la cautivadora firma de a drop d'Issey.
Acorde de leche de almendra: magnifica la faceta envolvente de la fragancia con sus características cremosas y golosas.
Notas de almizcle: realzan la mineralidad de la fragancia para una seductora estela de larga duración.
El acorde de lila no se extrae de la flor en su estado natural. Surge de la imaginación del perfumista, gracias a la química verde diseñada para reducir su impacto en el medio ambiente. El frasco contiene un 12% de vidrio reciclado y se presenta en un estuche fabricado con cartón procedente de materiales forestales gestionados de forma sostenible y otros recursos controlados.
